Las Vidas del SysOp

Treinta años atrás, el 25 de noviembre de 1992, una BBS entró en línea por primea vez. Funcionaba en una computadora Tandy 1800HD con un módem de 2400 baudios. "La Cueva BBS" pronto creció hasta ser un sistema las 24 horas del día con más de 1.000 usuarios registrados. Tras una pausa de siete años entre 1998 y 2005, renació como un fénix electrónico. Benj Edwards cuenta la historia de sus vidas en ella.

Entren por módem

En Enero de 1992, en mi casa apreció un portal a un mundo paralelo, una cajita de plástico que decía "ZOOM", que se conectaba al puerto serial de la computadora. Este módem te daba el poder de conectarte a otras computadoras y compartir datos sobre la red telefónica.

Si bien ya existían los servicios de datos en línea como CompuServe y Prodigy, muchos aficionados creaban servicios en línea propios en miniatura, a los que llamaban "sistemas de carteleras electrónicas", o BBS. La Internet existía, pero no era ampliamente conocida fuera del ámbito académico.

Mientras que la Internet actual se parece una telaraña gigante que enlaza a miles de millones de usuarios en todo el mundo, la mayoría de las BBS eran dominios hobbistas con una sola línea telefónica, y solamente una persona podía llamarlas y usarlas por vez. Si bien eran comunes las redes de mensajería de BBS a BBS, cada sistema se comportaba mas bien como una cultura aislada regida por una especie de dictador de barro, el "operador de sistema" (o como se les decía mas a menudo, el "SysOp"). Este reinaba sobre cualquiera que entrara a la máquina.

No mucho después que tener el módem, me pasaron una lista fotocopiada que incluí decenas de números telefónicos de BBS presentes en nuestro código de área 919, en Carolina del Norte. Por entonces, la compañía de teléfonos cobraba muy caro las llamadas de larga distancia (que también podían incluir partes del área local), por lo que deberíamos limitarnos a las BBS de nuestra región. Esto condujo a que en EE.UU. las BBS fueran un fenómeno mayormente local.

Módem en mano, mi hermano llamó a la primer BBS de la lista (a esto le decíamos BBSear). Llenó el directorio de discado del programa Procomm Pluss con las BBS locales favoritas tales como "El Jardín del Pulpo", "La Tienda de Cuerpos", y "Pizarrón". Cada BBS tenía un sabor propio dado por su SysOp, quienes las decoraban con gráficas ANSI o menúes especiales y también hacían de MC y moderador de las conversaciones en línea.

Tengo el claro recuerdo de la primera vez que descubrí lo que era un BBS. Un día, mientras observaba el monitor sobre el hombro de mi hermano, me mostró el área de archivos de una de esas BBS, donde aparecía un listado con los ficheros disponibles para descargar a la computadora. Aparecía una página larga con programas Shareware para bajarse. Mis ojos se agrandaron, y algo hizo clic.

Me acuerdo de haber pensado: "¡podés bajarte juegos gratis!". Vi un archivo que decía "RAMPAGE.ZIP" que tenía como un centenar de kilobytes, o "100K". Pensando en Rampage de la Nintendo, uno de mis juegos favoritos del momento, le pedí a mi hermano que lo bajara. No quiso porque hubiese tardado cinco minutos con nuestro módem de 2400 baudios. Cualquier fichero de un megabyte hubiese tardado una hora en bajar.

Por entonces, el tiempo en línea era un bien escaso. La mayoría de las BBS sólo tenían una línea telefónica, y nadie podía ocuparla demasiado tiempo porque el SysOp podía desconectarte para que otros también pudiesen conectarse. Había más que eso en riesgo: como para conectarse usabas tu línea telefónica hogareña, la posibilidad que alguien levantara el tubo e intentara discar - arruinando con ello el proceso de transferencia - era muy alto. Cualquiera que fueran los riesgos, la idea de una proyección astral computarizada apareció en mi mente y nunca la abandonó.

El goce de BBSear

Si bien mi hermano comenzó a llamar a las BBS en enero 1992, la novedad parece habérsele pasado para marzo, de acuerdo a los registros de llamadas que tengo. Nunca volvió a llamarlas de nuevo. Pero la historia mía apenas comenzaba. Durante agosto de 1992 (o el 2 de agosto, si confío en mis registros), y apenas terminado el quinto grado, comencé a visitar las BBS locales por primera vez.

Para ello, necesitaba un nombre especial. Mucha gente en el mundo de las BBS usaba un alias cool en lugar de poner el nombre verdadero. Era común poner un nombre de usuario como "Horror Gorgon", "El Mago", y "Einsten". El nombre de usuario de mi hermano era "Dragón Azul", y su color favorito era el azul. Como mi color favorito era el rojo, así que elegí "Rojo Lobo". Me gustaban los lobos.

Para llamar a las BBS, primero usé la PC genérica de la casa, que tenía MS-DOS, que era la computadora de mi hermano cinco años mayor, al que comencé a molestar porque el la quería para programar y jugar. Y discaba tanto que le dejaba puesta la línea telefónica, lo cual molestaba a todos los demás en casa.

No tardé en convencer a mis padres para que contrataran una segunda línea telefónica para mi hábito de BBSear (aunque llamaba tanto a las BBS que puede que haya sido su idea). Conservo una anotación con la letra de mi mamá que la segunda línea costaría U$S 98.15 de instalación y U$S 16.61 por mes luego (unos $35 por mes al costo actual).

Usaba ProComm Plus (o PCPLUS, como le decíamos con mi hermano), que soportaba colores ANSI de IBM PC y códigos de terminal, y tenía un directorio automatizado para discar. Para llamar a una BBS, apretabas Alt+D, y del menú que aparecía elegías el nombre de la BBS con las teclas de las flechas, y le dabas Enter. El módem discaba (con ese ruido glorioso), y si la línea estaba ocupada, rediscaba una y otra vez hasta lograr conexión. Luego te sentabas y esperabas.

Cuando el módem del otro lado atendía, Procomm tocaba una melodía de tres letras ("Tururú"), borraba la pantalla y presentaba los gráficos de entrada para la BBS, y luego la pantalla de logueo (donde escribías tu nombre de usuario y contraseña). Era un viaje de ida.

Ese verano me pasé cientos de horas y caí en BBS locales con nombres crípticos y coloridos: "Histeria Caótica", "El Lugar En Línea", "La BBS de la Vía Rápida", y "Baxter", que eran algunas de mis favoritas.

Existía un problema: "La casa medieval de los horrores" se localizaba en Smithfield, Carolina del Norte: era una llamada de larga distancia desde Raelight (a pesar de estar en el mismo código de área), lo cual implicaba un pago adicional (algo así como un dólar por minuto, por entonces exorbitante).

Al mes siguiente apareció un recargo sorpresa de 200 dólares, que hizo que mi padre pateara paredes. Tras trabarme la computadora con el keylock (desactivaba el teclado), encontré una llave de repuesto, pero se dio cuenta y me sacó directamente el teclado. Tras lograr restaurar mis privilegios, volví a conectarme asiduamente de nuevo... con lo que aparecieron otros 200 dólares. Llamaba muchas veces a esa BBS porque el SysOp era mi mejor amigo - o al menos eso pensaba.

Mi padre murió en 2013. Unos días atrás, encontré una caja con sus cosas en la casa de mamá. Había un sobre con algo duro adentro. Lo di vuelta y del mismo cayó la llave tubo faltante del cerrojo de mi PC 386. ¡29 años después! Había trabado mi PC cuando llegaron 200 dólares en la factura de teléfono (por llamar a las BBS).

Configurando mi propia BBS

Transcurridos unos 30 años, se me hace difícil recordar, pero en noviembre de 1992 por algún motivo se me ocurrió empezar mi propia BBS. Se lo dije a mi papá, y él le pidió consejo a un compañero del trabajo que se llamaba Doug (era quien le había dado el módem Zoom). También le pregunté a los SysOp locales con los que chateaba, y todos ellos me dieron consejos diferentes. No sabía por donde empezar. También era difícil... porque tenía 11 años.

De acuerdo a mis notas conservadas (menciono haber perdido un diente en una de ellas) e impresos desperdigados de una impresora Bubblejet conectada donde apretaba la tecla Print Screen y volcaba un pantallazos de contenido a papel, exploré varias opciones de BBS. Por consejo de mi papá o de Dough, probé el modo host incorporado en Procomm Plus, que era muy básico y carente de lustre. También usé un programa aparte llamado "Minihost", un programa mínimo de BBS.

En algún momento decidí llamar a mi BBS "La Cueva". Mi razonamiento de 11 años, según creo, habrá sido: mi nombre es Rojo Lobo. ¿Dónde viven los lobos? En cuevas. Aparte del hecho biológico, tal vez pensaba en un cubil de un lobo. El calorcito del cubil, cerrado por todos lados al ser un agujero en la tierra, me llamó la atención.

En cualquier caso, el registro inicial la puesta en línea de La Cueva BBS (usando Minihost) consiste en un papel impreso el 25 de noviembre de 1992, el día previo al de Acción de Gracias. Es posible que intentara el modo host de Procomm Plus antes, pero mis registros electrónicos se perdieron poco después.

Usé una Tandy 1800HD basada en una 286, prestada de mi papá, pero las cosas cambiaron más rápidamente en la medida que exploraba mis opciones. No poco después, mi papá compró una IBM PS/2 Modelo 25 con monitor monocromático y la muy lenta CPU 8086 original, a la que cambié tras pocas semanas. También probé un programa de BBS llamado VBBS por un período de tiempo muy corto.

Incluso antes de estar completamente lista, decidí dar el salto y anunciar el número de mi BBS en otras BBSs. Comencé así a recibir llamadas a la línea de la BBS, durante esa misma noche, lo que molestó a mis padres: aún tenía un teléfono convencional (con el timbre activado) en mi habitación.

Una noche, la segunda línea llamó y atendió mi mamá. Quien llamaba la escuchó hablar y levantó también su auricular. Recuerdo a mi mamá diciéndole al tipo que sólo tenía 11 años y que era tarde para hablar conmigo, que me tenía que ir a la cama. Por supuesto que fue muy vergonzoso, ya que la misma persona mencionaría el episodio luego para molestarme "Hablé con tu mamá, y me dijo que te tenés que ir a la cama!".

Por entonces, muchos usuarios de BBS o los SysOps con los que hablaba eran adolescentes, principalmente de escuelas secundarias. Pero mas adelante me hice amigo de un sysop local llamado David Colthran, alias "Bc", que era el sysop de Baxter BBS, una de mis carteleras favoritas. Con 26 años, él sabía mucho más y era mas maduro que la mayoría de los SysOps que conocía. Parecía a adulto. Incluso comenzamos a hablar por "voz" como le decíamos", ocasionalmente por teléfono, para que pudiese ayudarme a hacer las configuraciones, y recuerdo a mi mamá revisando las cosas para asegurarse que no hiciera porquerías. Realmente hizo bien, y viendo en retrospectiva, lo considero un mentor valioso.

Bc notó que usaba VBBS y me recomendó WWIV, un programa de BBS local mucho más popular, que él mismo usaba en su propia cartelera. Con su ayuda - y con la ayuda de otros mas - configuré mi versión de La Cueva en WWIV el 12 de diciembre de 1992 (el registro más temprano que tengo). Bc también me ayudó a unirme a una cartelera de mensajería local llamada FITTAnet, donde intercambiaba mensajes electrónicos entre sistemas a través de discado automatizado durante las horas de la noche.

Pero ocurrió el desastre. Ese mismo mes que comencé mi BBS propia - tras anunciar la BBS a todo el mundo (a todo sysop que conocía), algunos de los adolescentes locales se pusieron celosos. Como notó Bc, yo era el sysop más joven en la zona, y eso se hizo conocido en seguida. El sysop anterior sysop más joven era mi amigo de larga distancia, y eso aparentemente le molestó. Entonces gente que no conocía comenzó a llamar, intentando hackear mi nueva BBS.

En esos días en todas las BBS a las que llamaba ponía la misma contraseña, entre ellas en la BBS de larga distancia de mi amigo. Como resultado, tanto él como sus amigos tenían mis credenciales de logueo registradas en sus BBS, y comenzaron a loguearse a todas ellas haciéndose pasar por mí, posteando mensajes públicos malignos a mi nombre, iniciando peleas con los demás. Cuando descubrí esto, me mortifiqué e intenté defenderme, pero resultó imposible. Mi amigo y su banda habían usado mi apodo y carácter como una marioneta, convirtiendo el lobo en un mono tití, y humillándome frente a otros.

En cualquier caso, por entonces tenía otro amigo apodado Radon, quien me diseñaba los menúes personalizados (los mismos que uso, aunque modificados, hasta el día de hoy), y regularmente llamaba a La Cueva, ofreciendo actualizaciones. De alguna forma, mi amigo de larga distancia y su banda sabían que él lo hacía. Una noche repitieron el modus operandi: llamaron impersonando a Radon, adjuntaron un fichero EXE, y en el mail algo como "Acá tenés los menúes nuevos que querías". Con ello confié y ejecuté el archivo.

Era el año nuevo de 1993, me senté y miré como un Troyano llamado Esquizofrenia formateaba mi disco rígido, destruyendo todo lo que había escrito.

Presioné Print Screen y lloré. Sólo tenía 11, y no tenía backups. Tanto por los mejores amigos...

Recuperando...

Tan devastadora como fue la experiencia, puse en línea mi BBS nuevamente, con una instalación nueva de enero de 1993, si bien perdí datos toda la base de datos de los usuarios, sus mensajes, los archivos y los juegos que había configurado el mes anterior. Le dije a Bc lo que había pasado, y me ayudó a rearmar las piezas del rompecabezas y empezar de nuevo.

Las traiciones del mes de diciembre me afectaron mucho, y esencialmente me dividieron en dos personas. Sería "Rojo Lobo" en línea, y nadie conocería mi edad o nombre real. Pretendí tener treinta y pico, jugada que documenté en mi registro. Fuera de línea nadie - excepto unos pocos confiables - sabrían de mi vida en las BBS. Así podría aislarme a mi mismo de estos daños. Recientemente, con la ayuda de una terapista, me di cuenta que ese episodio era la raíz de mis muchos temas de confianza, con los que cargado hasta estos días.

A pesar de todo, pasé buenos momentos. En enero de 1993, conocí a mi mejor amigo Nukemasterm, cuando llamó a mi BBS. A menudo hablábamos por teléfono, y fuimos a varias aventuras en línea juntos, incluyendo MUDs, MUSHes, y mas. Aún es mi amigo más cercano, al día de hoy. Nukemaster diseñó muchos de las pantallas de arte ANSI de La Cueva BBS que definieron su apariencia como cartelera. En particular, quienes discaban veían estas al loguearse o cortar.

Al comenzar mi nueva vida como un ficticio de 33 años, las cosas comenzaron a ordenarse. 1993 fue un año explosivo en cuanto a la actividad de las BBS. Agregué a mi BBS juegos de puerta conocidos, como TradeWAars 2002, Operation: Overkill II, Guerra Global, y Lucha de Comida. Con la ayuda de muchos usuarios que subían juegos, utilidades y gráficos, repoblé la sección de archivos de La Cueva BBS, que eran la cocarda de la cartelera. Hoy, pueden encontrarse mi sección de archivos vintage en The Internet Archive.

En retrospectiva, el año más ocupado de La Cueva BBS fue 1994, apenas antes que la Internet comenzara a poblar el territorio salvaje de las comunidades telématicas. 1995 fue un gran año también, pero fue el año donde se popularizó un Proveedor de Internet Local conocido como Nand0.net, que ofrecía acceso a Internet, lo que me sacó muchos usuarios.

Con todo, la tecnología de mi BBS mejoró. Advertido que los usuarios comenzarían a migrar hacia pasturas más tiernas ofrecidas por BBS con módems más rápidos, dejé de lado el comunicador de 2400 baudios, reemplazándolo por un modelo Intel de 14.400 baudios, y poco tiempo después cambié a 28.800 baudios. Y mi computadora también sumó caballos de fuerza: luego de tener La Cueva en una 386 de 16 MHz por algunos años, mi papá me compró una 486 DX4 genérica que corría a 120 MHz y volaba en modo DOS, aunque usaba Windows 3.1 encima de él. Al final, corría Windows 95 con WWIV v4.24 en el prompt de MS-DOS bajo Windows, con lo que podía dejarla en segundo plano mientras hacía otras cosas en Windows.

En 1996 y 1997 vi el decline de las llamadas, pero aún parecía relativamente activa. Para comienzos de 1998 quedaban muy pocas BBS locales, y el arroyo de llamadas a La Cueva fue secando hasta convertirse en un goteo. Por otro lado, cada vez me daba utilizar mi segunda línea para conectarme a Internet a lo largo del día.

El último día de La Cueva BBS original fue el 9 de febrero de 1998. Estaba en 11 grado, por cumplir 17 años. Recuerdo despertar una mañana, revisar la BBS, y notar que una pérdida de memoria (algo bastante corriente en los juegos de puerta) había colgado la BBS. In vez de reiniciarla, decidí simplemente sacarla de línea. No hubo ceremonia ni lágrimas; simplemente había llegado la hora de colgar el módem, dejar la vieja BBS y pasar a otra cosa.

Coda: La Era Telnet

Como está registrado en fotos o impresos, tengo cierta predilección por historiar y documentar cosas. Incluso cuando tenía 11 años, preví registrar y predecir qué artefactos serían importantes para el futuro. Por esta época comencé a colectar computadoras antiguas y consolas de juegos (con el objetivo de poner un museo, lo cual nunca sucedió).

En 2005, comencé a rever mi pasado BBS en la Internet con posteos en un blog que fundé, "Computación y Juegos Antiguos". Fue allí donde públicamente revelé mi edad real como "Rojo Lobo", el SysOp (por entonces tenía 24 años). De forma sorprendente, recibí dos correos electrónicos de antiguos usuarios de La Cueva BBS que se sorprendieron al enterarse. Uno de ellos era incluso un conocido cercano con quien a menudo jugábamos Duke nukem 3D cooperativo. Por entonces no tenían ni idea que de mi edad.

Fue entonces que decidí preparar una versión Telnet de La Cueva BBS usando el software Synchronet, que podía usarse muy fácilmente con conexiones a Internet. Hoy, aún hospedo dicha versión de La Cueva BBS, y hasta escribí una guía para conectarla.

N.d.T: es con:

telnet cavebbs.homeip.net

La Cueva BBS original funcionó un poco más de cinco años, pero la versión Telnet de La Cueva lleva funcionando 17 años, mucho más que mis días de discado telefónico. ¿Esta es un homenaje, o pasó a ser la verdadera? ¿Dónde termina la nostalgia y empieza el presente? Resulta que el velo entre pasado y futuro es más permeable que lo que se pensaba.

En lo que a mi respecta, mi identidad como sysop de BBS ahora está completamente integrada a mi vida en general. Ya no es un alto secreto o un rol divergente de personalidad, sino algo que puedo abrazar con orgullo, así como apreciar mi era formativa. Por entonces, los habitantes de las BBS eran los nerds, los raros. Hoy todo el mundo usa servicios en línea parecidos a un BBS, y ni siquiera se dan cuenta.

por Benj Edwards