A la división del Derecho Romano entre el derecho de personas y de cosas

(ius personale y ius reale)

se le escapaban las esposas, los niños y los siervos, medio personas, medio cosas. A ese grupo se han unido en nuestro tiempo los animales . De como se resuelva esto depende en gran medida el futuro del Derecho y, con él, el de nuestras sociedades.