A simple vista, parece que con los términos aplicación, ejecutable y proceso, nos estamos refiriendo a lo mismo. Pero hay sustanciales diferencias entre ellos y debemos tenerlas claras.
Una aplicación es un tipo de programa informático, diseñado como herramienta para resolver de manera automática
un problema específico del usuario.
Debemos darnos cuenta de que sobre el hardware del equipo, todo lo que se ejecuta son programas informáticos, que,
ya sabemos, que se llama software. Con la definición de aplicación anterior, buscamos diferenciar las aplicaciones, de
otro tipo de programas informáticos, como pueden ser: los sistemas operativos, las utilidades para el mantenimiento del
sistema, o las herramientas para el desarrollo de software. Por lo tanto, son aplicaciones, aquellos programas que nos
permiten editar una imagen, enviar un correo electrónico, navegar en Internet, editar un documento de texto, chatear,
etc.
Recordemos, que un programa es el conjunto de instrucciones que ejecutadas en un ordenador realizarán una tarea o
ayudarán al usuario a realizarla. Nosotros, como programadores y programadoras, creamos un programa, escribiendo su
código fuente; con ayuda de un compilador, obtenemos su código binario o interpretado. Este código binario o
interpretado, lo guardamos en un fichero. Este fichero, es un fichero ejecutable, llamado comúnmente: ejecutable o
binario.
Un ejecutable es un fichero que contiene el código binario o interpretado que será ejecutado en un ordenador.
Ya tenemos más clara la diferencia entre aplicación y ejecutable. Ahora, ¿qué es un proceso?
De forma sencilla, un proceso es un programa en ejecución.
Pero, es más que eso, un proceso en el sistema operativo (SO) es una unidad de trabajo completa; y el SO gestiona los
distintos procesos que se encuentren en ejecución en el equipo. En siguientes apartados de esta unidad trataremos más
en profundidad todo lo relacionado con los procesos y el SO. Lo más importante, es que diferenciemos que un
ejecutable es un fichero y un proceso es una entidad activa, el contenido del ejecutable, ejecutándose.
Un proceso existe mientras que se esté ejecutando una aplicación. Es más, la ejecución de una aplicación puede
implicar que se arranquen varios procesos en nuestro equipo; y puede estar formada por varios ejecutables y librerías.
Completando, ahora, la definición inicial que dimos de aplicación, ya sabemos que, al instalarla en el equipo,
podremos ver que puede estar formada por varios ejecutables y librerías. Siempre que lancemos la ejecución de una
aplicación se creará, al menos, un proceso nuevo en nuestro sistema