Correzagal - 277

De repente, justo delante tuya, cae una lluvia de dardos que colgaban de las ramas de un árbol mediante un astuto mecanismo de cuerdas. Pero el monstruito ha sido tan torpe que ninguno te ha dado.

—Hola, —te dice el monstruito. ¿Te ha gustado mi broma? Solo son unos darditos que te hubieran hecho cosquillitas como mucho, no irás a pensar que estaban evenados ni nada de eso, ¿verdad?

Tus opciones

Atacas a ese traicionero

Le dejas en paz

Reglas

Saber y Conocimientos