💾 Archived View for guie.welhaba.mx › avolar › 202404 › 14_Crisis2-ExplicarLoQueNoExiste.gmi captured on 2024-06-16 at 12:33:43. Gemini links have been rewritten to link to archived content
⬅️ Previous capture (2024-05-12)
-=-=-=-=-=-=-
--------------------------------> Autor: @leoperbo Primera vez publicado: 4 de abril de 2009 <--------------------------------
đź”™ Escalas previas: Crisis 1
En aquĂ©l planeta con destino fatĂdico, las eras habĂan transcurrido sucediĂ©ndose unas a otras, siendo unas tesis, otras antĂtesis y algunas sĂntesis, pero siempre dejando un estigma para los vencidos y poder hereditario para los vencedores.
De a poco, no era Ăşnicamente la historia una vĂa para justificar las tiranĂas: A los herederos del poder se les habĂa ocurrido la idea de legislar, escribir las normas de convivencia y colaboraciĂłn maquilladas con una extensa parafernalia que pretendĂa convencer a los pueblos de la bondad de las instituciones, de las buenas intenciones de la autoridad y de que Ă©sta no era más que una extensiĂłn del poder que los mismos pueblos ejercĂan: Se les ocurriĂł la democracia como una "dictadura maquillada de poesĂa".
Se volvieron moda las revoluciones, los golpes de estado y la sustituciĂłn de tronos y coronas por parlamentos, congresos y ministros que decĂan servir a los pueblos. A la par, en medio de aquella distracciĂłn que ocasionaban las beligerantes bĂşsquedas de libertad y respeto a los derechos humanos, se gestaban a oscuras las vĂas para globalizar el poder de unos cuantos, globalizar las condiciones para conseguir esclavos voluntarios (que convenientemente dejarĂan de llamarse esclavos y se les nombrarĂa "recursos humanos") que desgastaran sus vidas en la bĂşsqueda de un sueño que les costarĂa su salud, su familia y sus principios, en supuestas jornadas de ocho horas que terminaban siendo de veinte, por un puñado de dinero que de un dĂa para otro perderĂa su valor, pero dejando en manos de los gigantes capitalistas y polĂticos, anĂłnimos e intangibles o famosos e intocables, el producto de su trabajo, lo que en realidad no perderĂa jamás su valor.
Globalizaron entonces la posibilidad de abrir fábricas en los pueblos que ofrecieran más facilidades a cambio de miserias y cerrarlas donde la gente comenzara a ser consciente de esa esclavitud disfrazada de "oportunidades de empleo". Y siempre estaba de por medio ese invento del que se valĂan los poderosos para hacer cumplir sus intereses, para premiar a sus aliados con dádivas y relumbres. Pero incluso aquellos aliados, aquellas rĂ©moras al frente de medios de comunicaciĂłn, de cargos polĂticos, de sindicatos y de grandes de empresas, veĂan sus sueños caer por causa de aquello que ellos mismos defendĂan y nombraban como "crecimiento sostenible".
El crecimiento sostenible dejĂł de serlo y ni las más audaces estrategias para favorecer el consumismo podĂan hacer frente a la realidad: los recursos se acababan, la gente ya no podĂa producir más allá de las veinte horas de trabajo sin desfallecer, quienes se habĂan endeudado para vivir el sueño del poder no estaban pagando su deuda, las rĂ©moras se tronaban los dedos al ver sus ambiciones en peligro y retiraban sus inversiones, cerraban sus empresas echando a la calle a millones de esclavos voluntarios que ya no podĂan aspirar ni siquiera a eso porque ya les habĂan despojado de sus tierras y de sus principios... Los herederos del poder, los exclusivos y excluyentes, inventaron un tĂ©rmino, que además fue una estrategia, para definir esta situaciĂłn: Crisis Financiera.
Y el tĂ©rmino sirviĂł para mantener calmada a la gente, para dejarla a la expectativa de lo que harĂan "los expertos" para solucionarlo todo y en la disposiciĂłn de "ayudarles" a hacerlo. Todo era culpa de "la crisis" pero Ă©sta no terminaba de ser responsabilidad de nadie... La crisis no era más que una pausa que globalizaba una sensaciĂłn de miedo y sometimiento, que servirĂa como pretexto para deshacerse de los estorbos y reafirmar la lealtad de los esclavos voluntarios y las rĂ©moras que deseaban que todo volviera "a la normalidad"... Esa normalidad que mantendrĂa todo en su lugar... Cuando las rĂ©moras se pusieron de acuerdo entre sĂ, bajo el mando de los herederos del poder, pasĂł la crisis, todo estaba bien, al planeta se le podĂa seguir devastando, a la gente se la podĂa seguir explotando, el dinero podĂa seguir circulando con su inequitativo valor, los pueblos seguĂan pagando sus impuestos por vivir en paĂses que parecĂan parques de diversiones surrealistas, la gente que conservĂł sus principios seguĂa pobre o en la cárcel pero ya todo estaba bien, iniciaba una "nueva era": Status QĂşo.
Y aquella nueva era serĂa la Ăşltima, la más corta de todas, porque aquĂ©l hermoso planeta habĂa dejado de ser verde y se habĂa secado dejando aguas grises y putrefactas; habĂa despedido a la mayorĂa de sus especies que ya no se reproducĂan más y sĂłlo dejaban una estela de muerte... Y aquella peculiar especie que habĂa sido capaz de pensar, habĂa sucumbido ante sus propios inventos, habĂa abandonado su realidad y se habĂa convertido en vĂctima de su sueño de ser el centro de todo aquello que ahora estaba aniquilado.
¿Por qué hay que explicar la crisis como algo que no existe?
La crisis financiera que tanto escuchamos y sufrimos en estos dĂas es resultado de una serie de inventos desafortunados. Somos vĂctimas de algo que no existe porque simplemente es algo que unos cuantos han inventado para que todos añoremos las migajas del poder y perpetuemos ese "ciclo sin fin" en bĂşsqueda de un sueño que no necesariamente se materializa para quien más se esfuerza o para el mejor intencionado, sino que se hace realidad para quien se atreve a escalar una cima en la que se deben aplastar las cabezas de otros.
Escribo esto sabiĂ©ndome parte de este sistema, sabiĂ©ndome un posible esclavo voluntario y posible e iluso aspirante a rĂ©mora, porque tengo presente que nadie escapa a esas posibilidades y no pretendo erigirme en una de las escasas excepciones a la regla. Pero soy tambiĂ©n testigo de lo absurdo de nuestro propio planeta y veo a mis padres (como los de muchos), entrando a la tercera edad, esforzándose por sobrevivir despuĂ©s de años de actuar de acuerdo a sus principios y de renunciar a su salud y hasta a parte de la armonĂa familiar en beneficio de empresas que les dieron la espalda a la primera oportunidad, les veo repitiendo el ciclo sin fin y me veo a mĂ, cobarde y "educado" siguiendo esos pasos a regañadientes.
El cambio se logra tomando una opciĂłn personal por lo que sĂ existe, renunciando de a poco a las invenciones, rompiendo ese esquema que se podrĂa dibujar como una serpiente que muerde su cola. El cambio se siembra en el propio corazĂłn y entre los más cercanos, se comparte y se cultiva sin juicios ni prejuicios, porque ninguno escapamos a las ataduras del sistema; el cambio se siembra y se cultiva con el esfuerzo y sacrificio de hoy, aunque quizás se coseche muchas generaciones despuĂ©s, aunque nos corresponda ser meros buscadores de un horizonte que parezca inalcanzable.
----------------------
(ɂ◔◡◔)ɂ ♥ Publicación con licencia CC-BY-SA ♥
----------------------------------------------
Ubica el cursor al final de la direcciĂłn (URL) de este contenido, que comienza con "gemini://". Luego, agrega un texto como el siguiente:
/comentar/[Tu mensaje.][ Tu nombre o seudĂłnimo.]
Por ejemplo:
gemini://guie.welhaba.mx//202404/14_Crisis2-ExplicarLoQueNoExiste.gmi/comentar/¿De cuál fumaste? Invita pa' andar igual. El Fer>
Pulsa ENTER, verás un mensaje de error (es normal, asà funciona), espera cerca de un minuto y
đź“– Consulta el Libro de visitas
⛑️ Nota en caso de que no veas tu comentario