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2024-02-01 20:08
Esta historia esta inspirada en un sueño que tuve hace un par de semanas que me despertĂł en medio de la noche, con miedo, porque se sentĂa como si hubiera sido un mensaje algo real… en ese sueño me habĂa hecho mejor amigo de la muerte.
Al inicio no lo eramos, era de hecho y sin saberlo mi contrincante, estaba intentando evitar la muerte, pero no la mĂa, la de un otro o una otra quizás, y nos enfrascamos en batallas y batallas sobre el tiempo y atravĂ©s de mundos y universos, pero siempre era el mismo tejido, la misma historia, la misma narrativa que nos ataba, era una pelea contra la muerte misma, contra su caza, robandole a su presa.
Al final, todos sabemos que la muerte es algo inevitable, quizá tanto para este mundo como para muchos otros, las cosas se disuelven, se esfuman, desaparecen, el existir tiene una expiraciĂłn, son verdades que nos hemos repetido durante mucho tiempo, lo vi, lo vivi, lo sentĂ, sentĂ lo inevitable, pero no me detuve e incluso en ese punto donde nos habĂamos ambos salido del todo, en el punto en el que no hay ni cielo ni espacio, en las sensaciones más allá del vacĂo donde nos encontramos, ahĂ lo entendĂ, en la trascendencia, era una historia que nosotros mismos habĂamos hecho, de intentos fallidos y de lo inevitable, pero no estaba enojado con ella ni ella conmigo, cuando nos encontramos ahĂ encontrĂ© en ella una cálida sonrisa, ella me entendĂa, y yo la entendĂa a ella.
No era una advertencia, no era una caza a mi o a quien amaba, no era una batalla sin fin, y tampoco era algo del todo inevitable, era podrĂa decirse, una lucha de voluntades, mi voluntad por salvar a alguien y la voluntad de ella por extinguir lo que debe de cesar de existir, ambos estabamos ahora en el entendimiento de nuestra lucha, era algo digno, incluso honorable, ella me sonrĂo y yo despertĂ©, sabĂa que habĂa encontrado a la muerte y esta me habĂa sonreido a los ojos.